Diez Cero Uno Graffiti Respect - Bogotá 2021

Después de todo lo que sucedió el año pasado en graffiti, con unos tiempos agitados en materia de política y de movilización social, la pintura de la ciudad poco a poco ha ido retomando su ritmo normal. Como lo mencioné en un artículo anterior, lo que se dio con los grandes muros como parte de la protesta ciudadana, comenzaría a dejarse de lado con el tiempo para darle paso a las intervenciones de writing a las que ya estamos acostumbrados. La pandemia y las condiciones políticas de nuestro país habían hecho que esta práctica, como muchas otras cosas de la vida cotidiana, entrara en una especie de pausa o de comportamiento aletargado que lentamente desaparece.

A pesar de que el graffiti en la ciudad no ha parado y que, como cada año, se observan distintos movimientos (mucho bombing, nuevos participantes, convocatorias, entre otros) en lo que a pintura se refiere, no podemos decir que hayamos tenido muchos eventos importantes en el año. Sin embargo, hubo dos bastante relevantes para la escena de graffiti en general. Por un lado tuvimos la proyección del video VSK En La Trampa, recuento de acciones del parche y homenaje a Skill, Shuk y Suber; por el otro, el evento que nos permitió encontrar lo que para nosotros fue Graffiti Respect 2021: Dirty Gallery de 109s. No quiero decir que el evento sea en sí lo que resulta en esta mención, sin embargo fue una buena manera de darle importancia y dignidad a un trabajo continuo que se ha dado durante años. 

BOMBING

109s es un parche que nos tiene acostumbrados a uno de los bombardeos más constantes en toda la ciudad. Es bastante importante que este parche haya permanecido activo en las calles durante tanto tiempo. Sobre todo después de observar, de manera repetida, que hay parches e individuos que aparecen durante temporadas para luego casi que desaparecer entre el ritmo desaforado del graffiti de una ciudad como Bogotá. Aunque tienen gran presencia en la localidad de Fontibón, toda la ciudad, e incluso las afueras, ha sido testigo de sus distintas apariciones.  

VALLAS

Ya ha pasado un buen tiempo desde que Bogotá vió por primera vez un graffiti sobre una valla publicitaria. Desde entonces es normal encontrar acciones de este tipo en toda la ciudad. Sin embargo hay características que hacen que unas sean más atractivas que otras. Entre éstas se puede tener en cuenta la ubicación, el formato, la producción (cantidad de tonos usados y técnica) y el registro. Teniendo en cuenta esto, uno, de manera subjetiva, puede decidir cuál valla es más relevante e importante que otra. Después de tanto graffiti en la ciudad ya no se trata de subirse a un lugar alto y pegar algo allí, hay más para tener en cuenta. 

Los 109s son un ejemplo contundente de lo que hablo. Desde hace un tiempo se han dedicado a pintar en vallas de una manera importante. Pero lo que hay que resaltar aquí es que sus graffitis, además de estar en puntos altos, transitados y visibles de la ciudad, cuentan con una gran elaboración en materia técnica. Lo mejor es que para esto, han tenido en cuenta también la forma en la que se hace el registro, algo que hoy es muy relevante. 

REGISTRO

Hoy no podemos hablar de graffiti sin su registro. Me he preguntado en varias ocasiones si éste puede llegar incluso a hacer parte del graffiti mismo, ya que lo que hablamos de este tema en muchas ocasiones se hace solo a partir de fotografías o videos que quedan para corroborar su existencia. Lo que quiere decir que allí, en la forma en la que se registra, también hay un espacio para la exploración. Una muestra importante de esto la podemos encontrar en el video Graffiti Olympics de One Up, una producción que, si bien muestra varias piezas de graffiti realizadas de manera simultánea y con distintos niveles de elaboración, se centra más que todo en la forma en la que éstas son capturadas en video para lograr su conjunción en una pieza audiovisual de gran factura. 

Estuvimos en Dirty Gallery 2, exposición y proyección del trabajo de 109s. He estado en otras muestras de este tipo antes y aunque hay un formato similar y recurrente en estos eventos, este llamó especialmente mi atención. Lo hizo específicamente por el registro en video. Si bien fue un audiovisual relativamente corto (20 min. aprox) es de destacar la curaduría del contenido y la producción como tal, sobre todo en lo que se refiere a las vallas publicitarias. Las tomas realizadas en drone permitían tener una mejor visión de estas acciones de altura y su ejecución. Tener la posibilidad de estar cerca de estas producciones, lo cual es difícil desde la fotografía por su lejanía y planos desde abajo, cambia totalmente el panorama. Mucho más si tenemos en cuenta que para realizar este tipo de registro se necesita de equipo (humano y tecnológico) especializado, así como un plan, así sea mínimo, de rodaje y producción. Lo anterior demuestra que en este sentido el parche de 109s, por lo visto hasta el momento, va un paso adelante. 
 

Por todo lo anterior queremos demostrar nuestra profunda admiración y respeto por todo el trabajo realizado por los 109s en los últimos años. Larga vida a su graffiti.