- Opinión
El Graffiti En La Administración Peñalosa
- Fabián Ávil

En los últimos días, los medios de comunicación han dado a conocer las declaraciones de Daniel Mejía, nuevo secretario de seguridad nombrado por Enrique Peñalosa, y en lo que ha dicho, la palabra “graffiti” no ha estado ausente. “Puede no haber un solo ladrón, pero si está lleno de grafitis que no son artísticos, por ejemplo, genera percepción de inseguridad y hay que atacarlo.” dijo en una entrevista con El Tiempo que se dio a conocer el pasado 28 de diciembre. Declaración que no sorprende puesto que Peñalosa había dicho lo mismo en agosto de 2012 a través de su cuenta de Twitter: “Vendedores ilegales y carros en aceras, graffiti, mugre, avisos desordenados, mala iluminación traen inseguridad.”
Como anunció Mejia, al graffiti lo van a atacar. Cuando utiliza la palabra “atacar”, se puede concluir inmediatamente que lo harán por la vía represiva, lo que significa que habrá más UPJ, un comportamiento más agresivo por parte de los tombos y las multas que el mismo secretario anunció. Cómo lo harán? Modificarán el decreto 75 de 2013 o simplemente sacarán uno nuevo. “Son multas que tendremos que establecer según nos permita la ley. Lo que no nos permita, tendremos que tratar de generar cambios en la ley”, dijo el secretario de seguridad según La FM.
El secretario también hace la distinción entre graffitis que son y no son artísticos y según dice RCN, “dijo que se buscará crear murales artísticos en diferentes zonas de Bogotá para que no se use cualquier pared para dibujar” Queda claro que los “graffitis que no son artísticos” son en la mayoría graffiti writing ilegal: tags y throw ups. Se seguirán incentivando en cambio los grandes murales como los del centro de la ciudad, la 26 y similares, y puede que se borre mucho de lo que hay.
Para esto Caracol ya les adelantó el trabajo con la opinión pública cuando sacó su especial “Graffitis Arte o Vandalismo”. Para nosotros un especial de ese tipo lo único que busca es radicalizar la opinión de las personas frente al graffiti. ¿Para qué? Para que cuando el gobierno decida promover iniciativas para reprimirlo y “atacarlo”, la opinión pública, en general esté de acuerdo. Aquí quiero introducir algunas palabras de Saga Uno, durante una entrevista en 2014, que me parece, van perfectas: ”..sin joder yo creo que el objetivo, es para hacernos ver a los escritores, más vándalos, y a los más plásticos como: esto es lo correcto, ese es el camino. Quieren es callar el caos, el caos que es culpa de ellos mismos.” Esperamos que todo esto no de pie para que la policía comience, como de costumbre, a cometer abusos de autoridad y que el gobierno, con esto, no esté incentivando a que ocurran más excesos como el de Tripido.
Es difícil hablar de lo que concretamente va a ocurrir, a penas conocemos las declaraciones del secretario de seguridad, pero hay cosas ante las cuales se puede estar preparado. Es posible que la nueva administración y las decisiones que tomen al respecto afecten el juego del graffiti, lo que no quiere decir que sea malo. Puede que el anuncio de multas y la presencia policial lo desincentiven y de hecho disminuya. Pero todo esto sin duda servirá para ver quiénes son los que finalmente, legal o ilegal, permanecen presentes. Esperamos por supuesto, en esta época ver lo mejor del vandal, acciones que de seguro serán más valiosas que en una ciudad permisiva donde se puede pintar en todo momento.
Lo cierto es que el graffiti no desaparecerá. La ilegalidad, la marginalidad y la estigmatización, en cierta manera son su fomento y su razón de ser. Algunos dicen que si no es ilegal, no es graffiti. No es que esté totalmente de acuerdo, pero sí creo que el ilegal es una especie de “graffiti en estado puro”, y según lo que anuncia el grupo de Peñalosa, es lo que tendremos la oportunidad (ojalá!!) de ver bastante durante su gobierno.
Para terminar unas palabras de Arise, WFK: “Ojalá mientras haya graffiti, siga habiendo policía. Si no, no sería tan divertido. ”